Excursión de un día desde Jerusalén a Cesarea y Rosh Hanikra

Diríjase en primer lugar a Cesarea, el bello puerto de pescadores transformado en capital romana por el rey Herodes. La visita incluye un paseo a pie por las abundantes ruinas arqueológicas, excavaciones y el majestuoso teatro romano de la ciudad que toma su nombre de César Augusto, en el que lo mejor es explorar a pie.

Continúe hacia Haifa, la tercera ciudad de Israel enclavada en el Monte Carmen. El punto de interés más sorprendente son los inmaculados jardines Baha'i, creados como monumento conmemorativo para los fundadores de la fe Baha'i.

Desde allí, se dirigirá a las formaciones rocosas de Rosh Hanikra en la frontera con el Líbano, donde los impresionantes acantilados blancos se reúnen con el mar Mediterráneo. La acción del mar en las blandas rocas ha creado un rico laberinto de cuevas y grutas de piedra caliza por las que tendrá la oportunidad de dar un paseo para explorarlas. Las grutas de Rosh Hanikra forman parte de la Reserva Natural de Achziv donde, si tiene suerte, podrá ver tortugas bobas y murciélagos, dos ejemplos de la fauna y flora autóctona en este lugar repleto de maravillas de la naturaleza.

Su excursión de un día desde Jerusalén termina con una visita a la ciudad de Acre. La ciudad también recibe el nombre de Akko, que significa "hasta aquí", lo que ilustra el hecho de que históricamente fue el punto más alejado del reino israelita. Allí visitará la ciudad subterránea y la cripta de los cruzados, un mundo complejo de túneles subterráneos y las salas utilizados como cuarteles generales por los Caballeros de San Juan. Antes de volver a Jerusalén, podrá pasear por el mercado de la ciudad antigua, donde podrá elegir un recuerdo de su día de descubrimientos.